Este domingo terminaba en Lyon la primera edición de los Premios Lumiére. Un festival de cine que se celebra en la cuna de los padres del séptimo arte, y que ha dedicado esta primera edición a un maestro: Clint Eastwood. El sábado, el actor y director recogía el premio honorífico por su contribución al cine, diciendo: "Les debemos mucho a Auguste y Louis Lumière, personalmente les debo 60 años de trabajo", según la agencia AFP.
A lo largo de seis días se han proyectado más de cincuenta películas de cineastas como Don Siegel, Sergio Leone, Luchino Visconti y el propio Eastwood... cada una apadrinada por un artista. Un festival que en definitiva es un homenaje al cine. Y nadie mejor que Clint Eastwood para inaugurar esta cita.
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