domingo, 29 de noviembre de 2009

Había una vez... un circo

El viernes una amiga me invitó al circo y con ello, me acompañó de vuelta a la infancia durante un par de horas. No era el circo de Miliki y los payasos de la tele. Los tiempos han cambiado también para este tipo de entretenimiento. Fuimos a ver el circo Ringling Bros, todo un ejemplo de cómo se han modernizado los payasos y las acrobacias. La función no se realizaba bajo una carpa bicolor sino dentro del Telefónica Arena. Tampoco había tigres ni leones, auque sí perros salchicha (los únicos animales que en esta ocasión salieron a la pista además de los elefantes). Un payaso montado en una bicibleta de apenas veinte centímetros o tres motoristas dentro de una jaula esférica son algunas de las actuaciones, que se completan con acrobacias, magia, equilibrismo, y sobre todo, mucho humor.



Pero en el circo más antiguo de Estados Unidos, no todo es alegría y color... El Ringling Bros ha sido acusado en diversas ocasiones de maltrato animal por organizaciones como PETA, que llegó a grabar un vídeo donde se muestra el trato recibido en este circo por elefantes y tigres.


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